¿Mi seguro del hogar no me cubre nada?
Esta reflexión es por desgracia habitual entre los consumidores, pero hemos de decirles que harían mal creyendo que un seguro No se necesita porque no cubra un daño de filtraciones que se te produce y que ninguna aseguradora cubre porque lo consideran falta de mantenimiento; o porque hayamos tenido la mala suerte de dejar la ventana abierta y que el agua de lluvia haya mojado nuestro parquet, o que hayamos tenido un atasco por falta de limpieza en el otoño de nuestro sumidero y el seguro rechace el siniestro, y tantos otros casos similares.
Un seguro de hogar se tiene, y esto conviene tenerlo presente siempre, No para esas pequeñas cosas, sino para no perderlo todo si se produce un incendio, o tener que hacer frente a una indemnización cuantiosa si se rompe una tubería o queda abierto un grifo y produces un gran daño a terceros que les obligue a hacer reparaciones cuantiosas, sustitución de muebles, y pernocta en hoteles mientras duran las reparaciones, a veces decenas de miles de euros que proteges por unos pocos cientos de euros de prima al año con el seguro de hogar. El error con las pólizas de hogar está en pensar que sirven para otra cosa que no sean esas catástrofes.
Naturalmente, hay pólizas caras que cubren todo tipo de cosas menores, incluso que se te caiga café sobre el sofá, pero no cuestan poco dinero precisamente.